Analisis #127 - Cables Primus Power, Dedalus Signal y Speaker MKII - Analisis Ricable
Elegí Ricable principalmente gracias al consejo de algunos amigos aficionados a la alta fidelidad, que hablaron muy bien de ellos tras haberlos probado en sus sistemas. Enseguida me llamó la atención la calidad de construcción de los cables, evidente desde el primer contacto: materiales sólidos, acabados cuidados y una atención al detalle que transmite seriedad y competencia. Tras obtener más información también en Internet, decidí probarlos personalmente, y debo decir que la impresión fue inmediatamente muy positiva. Para mí, Ricable representa un excelente equilibrio entre rendimiento, fiabilidad y valor, y por eso lo incluí en mi sistema.
y estética del producto?
En cuanto recibí el producto, la primera impresión fue muy positiva. El embalaje es elegante y pulcro, señal de atención no sólo a la funcionalidad, sino también a la experiencia del cliente. Una vez que cogí el cable, sentí inmediatamente la solidez y la calidad de los materiales utilizados: nada se deja al azar. El acabado es preciso, los conectores robustos y bien ensamblados, y la estética general es muy agradable, con un diseño que transmite fiabilidad y experiencia. Se integra perfectamente en un sistema de gama alta, tanto técnica como visualmente.
Para evaluar el producto, realicé pruebas comparativas con otros cables comerciales, utilizando únicamente pistas digitales que conozco muy bien y que suelo utilizar como referencia. Las sesiones de escucha tuvieron lugar en mi sala de escucha habitual, manteniendo todo lo demás en la cadena de audio sin cambios para garantizar la máxima coherencia. Además, para obtener una opinión más objetiva, involucré a terceras personas pidiéndoles que participaran en sesiones de escucha a ciegas y aportaran libremente sus impresiones. Este enfoque me permitió confirmar con mayor seguridad las diferencias percibidas y la contribución real del cable Ricable al rendimiento sonoro global.
impresiones auditivas?
Primus Power PA1
A pesar de pertenecer a la gama más asequible de Ricable, este cable de alimentación sorprendió. La diferencia más notable fue un fondo negro más profundo, que da más contraste dinámico a la música. En los pasajes más introspectivos de Shine On You Crazy Diamond de Pink Floyd, hay una limpieza que permite que los detalles ambientales emerjan con mayor naturalidad. Es como si el cable liberara a la fuente de un fino velo. No hay acentuación, sino una mayor compostura del sonido, con una base más estable sobre la que descansa todo el contenido musical.
Altavoz Dedalus MKII DS3
Este cable aportó una nueva estructura a mi sistema, sobre todo en la gama de medios-graves, más compacta y controlada sin perder cuerpo. Al escuchar Peaches en Regalia de Zappa, pude apreciar la claridad en los pasajes sincopados, con una mejor separación entre guitarras, trompas y teclados. Pero lo realmente destacable es la apertura tridimensional del escenario sonoro: los instrumentos que antes estaban simplemente "ahí" ahora se disponen en profundidad, casi en relieve. El cable parece devolver a la música la arquitectura compleja que ciertas producciones progresivas de los años 70 necesitan para brillar de verdad.
Señal Dedalus DR2
Este cable RCA tiene una forma muy elegante de ponerse al servicio de la música. No colorea, no se hincha, sino que deja que el mensaje sonoro emerja con su complejidad. En un tema como Moonchild de King Crimson, el Dedalus Signal reproduce con gran delicadeza las pausas, los ataques de los platillos, los toques del vibráfono, todo ello con un sentido del equilibrio y del dinamismo difícil de alcanzar. Es como si hiciera justicia a la materia prima, realzando incluso las microvariaciones tímbricas. Perfecto para los que, como yo, buscan emoción y fidelidad, no sólo impacto.
Primus Coaxial PC1
De todos los cables probados, el Primus Coaxial fue el que me dio la sensación de mejora menos perceptible. Lo utilicé para conectar mi reproductor de CD y, aunque escuché atenta y repetidamente pistas que conozco muy bien, no pude oír ninguna diferencia significativa en comparación con otros cables similares. Quizá la limitación esté en la propia fuente o en el tipo de conexión digital, que considero en general menos influyente que en otros puntos de la cadena de audio. Aun así, sigue siendo un producto bien construido, pero sigo teniendo dudas reales sobre el impacto sonoro real de un cable coaxial en este contexto.
Bridge Invictus Reference RPB
Utilizado para conectar las dos etapas de mis altavoces, mejora la cohesión y la velocidad de transmisión de la señal, especialmente en los pasajes complejos de Zappa, con un manejo más preciso de los transitorios que hace que la música fluya con más suavidad. Sin embargo, dado el elevado coste de los altavoces, las láminas de latón suministradas son una elección cualitativamente inadecuada que limita significativamente el potencial del cable y de todo el sistema. Los beneficios son perceptibles principalmente a volúmenes altos, mientras que a niveles moderados el efecto pasa a ser marginal, lo que pone en duda la eficacia de la inversión en contextos de escucha más moderados. En definitiva, aunque se trata de una mejora que merece la pena, elInvictus Bridge requiere necesariamente una combinación con componentes de un nivel adecuado para justificar su coste y ofrecer resultados realmente apreciables.
Sus conclusiones.
En una visión objetiva y equilibrada, es correcto reconocer que los cables -aunque fundamentales para garantizar la coherencia y la estabilidad- no son el elemento que define la calidad sonora de un sistema, sino un medio para potenciar lo que la electrónica puede ofrecer. Fuente, DAC, amplificador y altavoces siguen siendo los verdaderos protagonistas del sonido, mientras que los cables tienen la tarea esencial de mantener el equilibrio y la correcta transmisión de la señal entre estos componentes. Por lo tanto, es importante no atribuir un papel salvífico a los cables, sino considerarlos en función de la calidad de todo el sistema. En este contexto, Ricable destaca por la amplia gama de soluciones disponibles, repartidas en varias gamas de precios, que permiten a cada aficionado encontrar el producto adecuado a sus necesidades, sin desequilibrar económicamente la cadena de audio. El consejo es sencillo: invierta en cables en proporción al valor y al potencial de su sistema, buscando más la coherencia que la espectacularidad. Sólo así cada componente podrá expresarse al máximo, proporcionando una experiencia auditiva realmente satisfactoria.