Soy un entusiasta de la alta fidelidad desde hace más de cuarenta años y siempre me han atraído mucho los cables, así que hace unos dos años conocí el sitio web Ricable y me impresionó excepcionalmente la forma en que está estructurado el sitio y la meticulosidad con que se informa de toda la producción, tanto de los detalles para el neófito como de los datos técnicos más interesantes para el conocedor especializado. Esto me hizo probar los productos empezando por la línea de entrada; hoy en día los he probado todos y soy la feliz propietaria del conjunto completo de la gama alta Invictus.
y la estética del producto?
La construcción y la estética de los productos son realmente atractivas, bien hechas, de alta calidad y robustas; hay sustancia y no sólo humo como en otras ofertas "exóticas", y el refinamiento de los envases es tan bueno como cabe esperar, productos concebidos como premium independientemente de su posición en el mercado.
La prueba se hizo comparando una selección indefinida de temas (rock, pop , clásica, jazz, cantautores, etc.), nunca me detengo en sólo dos o tres temas sino que realizo la comparación durante unos días normalmente (queda una memoria sonora mucho más amplia, al tener la capacidad de escucha necesaria, y al ser yo también músico se me facilita). El cable que tenía antes (o mejor dicho, los cables porque eran el de la fuente, el del SACD y el que alimentaba el filtro de red) eran los Ricable Magnus MKII (que por cierto eran muy buenos comparados con los cables de serie) y los nuevos, los Ricable Invictus Power .
¿Impresiones auditivas?
La dinámica aumentó, el ruido de fondo se redujo a la mitad, la "negrura sónica" es extremadamente perceptible, es decir, el silencio entre los instrumentos que aumenta el contraste, el rango bajo es mucho más contorneado y firme, preciso y profundo, el rango alto adquiere más aire y por lo tanto expande el escenario, parece que el sistema suena más fuerte, la tridimensionalidad se expande, en fin, una maravilla, el cable donde percibí el efecto más tangible de todos. Quería añadir que incluso el cable que alimenta el filtro separador desde la red eléctrica hizo su papel y no podría prescindir de él, realmente sorprendente.
Sus conclusiones.
En conclusión no puedo más que recomendar este Netzkabel a todos aquellos que quieran dar una nueva vida a su electrónica, especialmente a las etapas de potencia para Altavoces o a los integrados, sean del valor que sean. He probado el cable incluso en un integrado que cuesta 590 euros, es decir, menos que el cable, y parece que ha puesto el turbo en marcha, un comportamiento completamente diferente de la fuente de alimentación, unos graves más sólidos, una dinámica más evidente, unos graves más nítidos, un detalle más claro. Obviamente, el producto está dirigido a objetos de muy alto calibre, pero en mi opinión también puede elevar el sonido de muchos aparatos electrónicos intermedios en varios escalones de calidad.